El exceso de hierro provoca manchas rojizas, sabores metálicos y problemas en tuberías. Para solucionarlo:
- Diagnóstico: realiza un análisis de la calidad del agua para medir la concentración de hierro (Fe²⁺ y Fe³⁺).
- Oxidación y precipitación: incorporar un sistema de aireación o inyección de cloro/hidroperóxido para oxidar el hierro.
- Filtración con medios catalíticos: instalar filtros específicos (como filtros Birm, Katalox o Zeolitas especializadas) en combinación con tanques en fibra de vidrio.
- Mantenimiento y monitoreo: cambiar periódicamente los medios filtrantes y revisar el sistema con profesionales de FluinTec.
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